Marcelo Daniel Colombo se convirtió en el nuevo presidente de la Conferencia Episcopal argentina y el en comienzo de su mandato dejó un duro mensaje para Javier Milei. “Es importante que toda reforma económica sea con la gente adentro”, dijo el arzobispo de Mendoza y expuso la necesidad de generar un “diálogo” con el Gobierno nacional.
“Creció el número de personas que van a comedores. En Mendoza recibimos a la noche a gente de la calle, para darles comida. Pasamos de más de 50 a más de 200, se disparó la proporción”, contó en Radio Mitre.
Sobre la administración de Milei, Colombo dijo: “La economía está al servicio del hombre. Evidentemente hay una apuesta fuerte a ordenar la economía, a ver cómo se gasta la plata, a priorizar los puntos de los gastos. Es importante que toda reforma económica sea con la gente adentro, y no con la gente afuera, teniendo en la mira a la gente, para que esté siempre mejor”.
“Hay mucha gente afuera –continuó-, lo vemos en lo que tiene que ver con mantener comedores, merenderos, esto se está haciendo bastante peliagudo. En las organizaciones de Cáritas, lo vemos con mucha preocupación, creció el número de personas que van a comedores. En Mendoza recibimos a la noche a gente de la calle, para darles comida. Pasamos de más de 50 a más de 200, se disparó la proporción”.
Y planteó: “Los seres humanos tenemos una mirada que avanza y evalúa, lo crítico (al Gobierno) tiene que ver con procurar lo mejor para la gente, y en la medida en que estamos analizando la acción del Gobierno podemos decir: ‘Con la gente adentro o afuera, con todos o con algunos’. En ese sentido, vamos señalando principios de orientación”.
“Evidentemente el que gobierna, lo sabemos los que tenemos que gobernar, no es fácil exponer prioridades, poner acentos. Solo que la mirada no sea dejar a nadie fuera de lo que le corresponde, ¿no? Por dignidad”, subrayó el nuevo jefe de la Iglesia Católica.
Quién es Marcelo Colombo
El arzobispo de Mendoza fue elegido el martes como nuevo presidente de la Conferencia Episcopal argentina, tras haber sido en los últimos años su vicepresidente primero. Considerado un progresista moderado, su elección supone que no evitará las críticas al Gobierno cuando crea que corresponda.
Colombo, de 63 años, fue ordenado sacerdote en 1988 en la diócesis de Quilmes por el obispo progresista Jorge Novak. En 2009 fue elevado a obispo de Orán, en 2013 nombrado obispo de La Rioja y finalmente en 2018 designado arzobispo de Mendoza.
Ahora reemplaza al obispo emérito de San Isidro, Oscar Ojea, de una línea similar y que tuvo en estos casi siete años al frente de la institución eclesiástica un perfil más bien bajo.
Como obispo de La Rioja, Colombo impulsó la beatificación finalmente concretada de uno de sus antecesores, monseñor Enrique Angelelli, dos sacerdotes y un laico asesinados durante la dictadura, y cuando el actual gobierno decidió vetar el aumento a los jubilados que había dispuesto la oposición en el Congreso, criticó la “sobreactuación de la crueldad en algunos anuncios”.
En enero cuando Milei llevaba un mes como presidente, la conducción del Episcopado -con Ojea a la cabeza, secundado por Colombo- denunció que había alimentos para los comedores comunitarios retenidos en un galpón del gran Buenos Aires y otro de Tucumán y reclamó su inmediata distribución ante las urgentes necesidades de los sectores más vulnerables.